Nuestros Servicios
URO-ONCOLOGÍA &
Cirugía de Mínima Invasión
Cirugía ROBÓTICA y Laparoscópica
Diagnóstico y tratamiento de los diferentes Tumores malignos del Tracto urinario y genitales masculinos.
Tumores renales
Cáncer de próstata
Tumores de vejiga
Tumores testiculares
Tumores de uretra
Cáncer de Pene
Cuando se realiza un diagnóstico a tiempo, se puede ofrecer un tratamiento curativo en la mayoría de los casos; por esto es muy importante visitar al urólogo a partir de los 50 años de edad.
Las ventajas de la Cirugía de mínima invasión son:
Menor tasa de complicaciones quirúrgicas.
Acortamiento de la estancia intrahospitalaria posterior al procedimiento.
Menor riesgo de sangrado durante el procedimiento.
Recuperación más rápida y regreso a las actividades cotidianas y laborales.
Menor dolor postoperatorio.
Cicatrices más pequeñas y estéticas.
Endourología
HoLEP, REZUM, Stents ureterales, NLPC, Nefroureteroscopía flexible, ECIRS, RTUP, ureteroscopía semirrígida y cistoscopías.
HoLEP (enucleación prostática con láser de Holmio):
Esta tecnología con láser, es la más novedosa para extraer el tejido prostático, habitualmente de gran tamaño (>80cc), que obstruye la uretra por crecimiento prostático obstructivo.
REZUM (terapia térmica con vapor de agua):
Es la aplicación de vapor de agua hirviendo al tejido prostático obstructivo en próstatas habitualmente <80cc, o bien, pacientes que están bajo tratamiento con anticoagulación.
La gran ventaja de esta tecnología radica en ser un procedimiento ambulatorio que se realiza con sedación.
Stents ureterales:
Nueva alternativa para el tratamiento de estenosis ureterales que impiden el paso de la orina del riñón a la vejiga; pueden ser estenosis benignas (ej. secundarias al paso de piedras a través del uréter) o malignas (ej. secundarias a cáncer).
Las estenosis también pueden ser internas (cuando el uréter cicatriza por dentro concéntricamente obstruyendo la luz ureteral) o externas (cuando un tumor o fibrosis intensa rodean abrazando y comprimiendo el uréter).
VENTAJAS: no se infectan, no se incrustan, no se calcifican, no requieren recambios por 3 a 7 años.
NLPC (Nefrolitotomía percutánea):
Indicada en litiasis renal (piedras en el riñón) con gran carga litiásica, lo que permite extraer todos las piedras en una sola cirugía.
Se realiza a través de una pequeña incisión en la espalda (<1cm), que accede directo al riñón, por donde se introduce el equipo necesario (nefroscopio, láser, canastillas de extracción, etc.) y se evacúan todos los fragmentos.
Nefroureteroscopía flexible:
Indicado en pacientes con litos (piedras) renales <2cm o localizadas en la porción superior del uréter.
Es un procedimiento endourológico, es decir, se accede a través del meato urinario (orificio por donde orina el paciente) con un equipo flexible, el cual se compone de una cámara de alta definición HD y un canal de trabajo por donde se introduce: el láser, guías de acceso, canastillas de extracción, etc.
Permite el acceso al uréter superior y riñón de forma segura sin realizar incisiones en el paciente, permitiendo destruir las piedras y extraerlas en su totalidad.
ECIRS (Endoscopic Combined Intrarenal Surgery):
Es la combinación de dos procedimientos endourológicos realizados en el mismo paciente, de manera simultánea en la misma cirugía (NLPC más Nefroureteroscopía flexible, ambos procedimientos explicados en párrafos anteriores).
Este procedimiento se realiza para pacientes que presentan una carga litiásica tan grande, y/o que además, el acceso por NLPC y la anatomía renal del paciente, no permiten llegar a ciertas zonas del riñón.
RTUP (resección transuretral de próstata):
Es otro tipo de procedimiento endourológico (se ingresa por el meato urinario, orificio por donde orina el paciente), que utiliza energía monopolar o bipolar para realizar la resección del tejido prostático benigno obstructivo.
Ureteroscopía semirrígida:
En este procedimiento se utiliza un equipo semirrígido para destruir y extraer litos (piedras) que se encuentran en el uréter inferior o medio y en algunas ocasiones uréter superior.
Este equipo se introduce a través del meato urinario (orificio por donde orina el paciente), y está constituido por una cámara y un canal de trabajo que permite el acceso del láser y los diferentes insumos que se requieren para extraer las piedras.
Cistoscopía:
Es un procedimiento endourológico, el cistoscopio, se introduce a través del meato urinario (orificio por donde orina el paciente) que a su vez es diagnóstico y terapéutico; nos permite evaluar la uretra, el esfínter urinario, la próstata (en el caso de los hombres), el cuello vesical y la vejiga.
Este procedimiento se utiliza para diagnóstico y tratamiento como en el caso de cáncer de vejiga, cistitis intersticial, estenosis (cicatriz concéntrica) de la uretra, extracción de piedras en vejiga, tomar muestras para cultivo, colocación de sonda foley bajo visión directa, etc.
Urología General
Infecciones del tracto urinario, Crecimiento prostático obstructivo, Varicocele, Hidrocele, Enfermedades de transmisión sexual, etc.
Infecciones del tracto urinario:
Las infecciones del tracto urinario las podemos dividir en:
Infecciones del tracto urinario bajo “cistitis”. Los síntomas habituales son:
Ardor al orinar, aumento de la frecuencia urinaria, sensación de urgencia urinaria, dolor en pelvis y en ocasiones existe sangre en la orina.
El tratamiento es con antibioticoterapia que deberá ser ajustado en base a un cultivo de orina para que sea un tratamiento eficaz y no generar resistencia antimicrobiana.
Infecciones del tracto urinario superior o “pielonefritis” (infección renal). Los síntomas habituales son:
Dolor lumbar, malestar general, fiebre >38º C, escalofríos, etc.
Algunas pielonefritis deberán ser tratadas de manera intrahospitalaria con antibióticos intravenosos, por esto es muy importante que siempre sea evaluado por un especialista.
Crecimiento Prostático Obstructivo Benigno:
El crecimiento prostático obstructivo benigno habitualmente inicia a partir de los 50 años de edad.
El grado de crecimiento y obstrucción será variable en cada paciente. Se recomiendo un chequeo a partir de los 50 a 60 años de edad, para prevenir que dicha obstrucción comience a afectar el vaciamiento vesical.
El tratamiento inicial en pacientes con síntomas leves puede ser con tratamiento médico; sin embargo es muy importante ser evaluado por un especialista para determinar el tipo de tratamiento (médico vs quirúrgico), cuándo iniciarlo, y qué técnica quirúrgica es la que más conviene de manera individualizada.
Varicocele:
El varicocele es la dilatación de las venas del plexo pampiriforme que drena la sangre de los testículos.
Esta dilatación puede producir dolor crónico, síntoma principal del varicocele; además se asocia en ocasiones a infertilidad e hipogonadismo (disminución del tamaño del testículo).
El tratamiento es quirúrgico, la técnica se llama varicocelectomía, ayuda a aliviar el dolor y aumentar la tasa de fertilidad.
Hidrocele:
Es la acumulación anormal de líquido entre dos capas que rodean al testículo.
Los síntomas son agrandamiento de la bolsa escrotal del lado donde se presenta esta patología, dependiendo la cantidad de líquido acumulado es la incomodidad y dolor que puede representar para el paciente.
El tratamiento es quirúrgico, además de drenar el líquido acumulado, es necesario evertir la túnica vaginalis (capa que envuelve al testículo) para que no recurra nuevamente el hidrocele.
Recuerda visitar al especialista.
Enfermedades de transmisión sexual:
Eliminación de verrugas por Virus del Papiloma Humano.
Vacunación contra el Virus del Papiloma Humano.
Eliminación de lesiones por Molusco contagioso.
Uretritis por Chlamydia o Gonococo, etc.
Circuncisión en la edad adulta
Fimosis: cuando se adhiere el prepucio al glande, o se genera un anillo fimótico en el prepucio que no permite su retracción, o la retracción es muy dolorosa.
Frenillo corto.
Verrugas por VPH abundantes.